Ámbito del caso
MIXTO
Motivo de la consulta
PIROSIS, SENSACION DE QUEMAZÓN FARINGEA Y SENSACIÓN DE ASFIXIA.
Historia Clínica
Mujer de 63 años.
No alérgica a medicamentos conocidos.
No fumadora. No bebedora.
Hipertensión arterial. Dislipemia. No Diabetes mellitus.
Insuficiencia venosa MMII.
IQx: Hallux valgus, quiste ovárico, ligadura de trompas.
Tratamiento: venosmil, simvastatina, enalapril.
Madre CCR con 80 años.
Realiza colonoscopia cada 5 años. Refiere pirosis intermitente que calma con omeprazol a demanda y cuidado dietético.
En seguimiento por neurológica por síntomas sugerentes de Parkinson incipiente.
La paciente acude a consulta por empeorar la clínica de pirosis, pero le preocupa sensación de quemazón faríngeo y sensación de asfixia continua. Se inicia tratamiento con omeprazol 40 a diario. Tras 3 semanas la paciente cada vez está más sintomática. Se deriva a digestivo preferente.
Realizan endoscopia digestiva alta donde se observa pequeña hernia de hiato y esofagitis péptico grado 1.
Dado que persisten los síntomas y los datos de la endoscopia se decide realizar PHmetría y Manometría.
Durante la espera de ser citada para dichas exploraciones, consultamos con neurología la posibilidad de retirar parche transdérmico de Rotigotina que coincide que inicio unos meses previos al inicio de los síntomas, retirándose.
PHmetría negativa para reflujo patológico.
Manometría trastorno motor primario leve, compatible con problemas neurológicos o estrés/ansiedad.
Enfoque individual
Ama de casa.
Enfoque familiar y comunitario
Vive con su marido. Tiene 3 hijos y 3 nietos.
Acude regularmente a consulta.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Reacción adversa medicamentosa. Asfixia y disfagia secundaria a medicación para Parkinson.
Diagnóstico diferencial.
ERGE
Esofagitis péptica.
Ca esofágico.
Tratamiento, planes de actuación.
Retirada de los parches transdérmico de Rotigotina.
Evolución
Tras la retirada de los parches la paciente comienza a mejorar y a los tres meses de la retirada está completamente asintomática.
Conclusiones (y aportación para el Médico de Familia)
Los parches transdérmicos de rotigotina se usan para tratar los signos y síntomas de la enfermedad de Parkinson (un trastorno del sistema nervioso que dificulta el movimiento, el control de los músculos y el equilibrio), como temblor en algunas partes del cuerpo, rigidez, lentitud de movimientos y problemas de equilibrio. La rotigotina pertenece a una clase de medicamentos llamados agonistas de la dopamina. Los parches tienen numerosos efectos secundarios leves entre los de mayor importancia a destacar la dificultad para respirar o tragar, urticaria y reacción dérmica.
Palabras clave: (Máximo 3,extraídas del “Medical Subject Headings” (Mesh))
Rotigotina, parkinson, asfixia.