Distensión abdominal, nauseas, y vómitos postpandriales en paciente de 60 años.

Ámbito del caso
Atención primaria
Motivo de la consulta
Distensión abdominal, nauseas.
Historia Clínica
Mujer de 73 años. NAMC. DM2. HTA. En reciente estudio por cardiología por supuesta angina estable. Acude a consulta por hiporexia, distensión abdominal, nauseas y vómitos postpandriales. Refiere astenia de reciente inicio y ocasionalmente ha objetivado heces oscuras tras la toma reciente de AAS. Solicitamos As donde destaca: hb 10.8. VCM 89. Creatinina 1.1 Urea 74. Tacto rectal se evidencia heces melénicas. Gastroscopia: mucosa gástrica traccionada hacia el interior del píloro, el cual estaba ocupado por tejido gástrico pasando a bulbo. Se insuflo al máximo evidenciando como un tumor gástrico submucoso volvió a cavidad gástrica por la distensión. Se localizaba a nivel de la transición cuerpo antro en cara anterior. La mucosa antral y bulbo con erosiones superficiales en relación con gastritis erosiva en relación con la toma de AINES. TACabdomen: se aprecia una lesión en antro gástrico intramural de bordes bien definidos y densidad grasa, prácticamente homogénea de 4.4cm, encapsulada que dadas las características radiológicas es sugestiva de lesión benigna (lipoma). No adenopatías mesentéricas.
Enfoque individual
Ama de casa.
Enfoque familiar y comunitario
Casada.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Cuadros suboclusivo secundarios a gran lipoma gástrico.
Tratamiento, planes de actuación.
Dada la clínica del gran lipoma se realizó resección quirúrgica. Se añadió omeprazol 20 mg.
Evolución
Tras la resección paciente completamente asintomática.
Conclusiones (y aportación para el Médico de Familia)
La mayoría de los lipomas gástricos son únicos y submucosos, siendo raro la ubicación subserosa. La mayor incidencia es entre la quinta y séptima década de vida con leve predominio en mujeres. Los síntomas son infrecuentes y la mayoría son diagnosticados de forma casual. El desarrollo de síntomas depende principalmente del tamaño y la localización del tumor. Se ha descrito que los síntomas aparecen generalmente con tumores sobre 4 cm de diámetro. Este tumor puede también manifestarse como hemorragia digestiva, obstrucción o intususcepción. El manejo del lipoma gástrico depende de sus síntomas, tamaño y sospecha de un diagnóstico alternativo, como tumor GIST. Seguimiento activo con endoscopias, ecografías o tomografías computadas en lesiones asintomáticas es una alternativa válida. Se recomienda resección quirúrgica en casos sintomáticos y en lesiones asintomáticas sobre 4 cm por el riesgo de generar complicaciones, pero el manejo definitivo debe adaptarse al contexto de cada paciente.
Palabras clave: (Máximo 3,extraídas del “Medical Subject Headings” (Mesh))
lipoma, vómitos, distensión abdominal

Autores de la comunicación

Isabel Galindo Román
Residente Familia. Centro De Salud La Velada. La Linea De La Concepción. Cadiz.

María Vílchez Jaímez
Medico De Familia. Centro De Salud. Tarifa. Cádiz.

José Mostazo Torres
Aparato Digestivo. Hospital De La Linea De La Concepción. Cádiz.