´´complejo en la piel``

Ámbito del caso
Atención primaria y hospitalaria (dermatología, traumatología)
Motivos de consulta
Mujer de 77 años, refiere pequeña lesión en rodilla izquierda que apareció espontáneamente y va aumentando de tamaño, no dolorosa, no la relaciona con traumatismo, una semana aproximadamente de evolución.
Historia clínica
AP: DM2, HTA, dislipemia, artrosis, glaucoma, qx cataratas. No convive con animales. TTo:humallog basal 20UI/12h, novorapid 29U/24h, timolol 5 en colirio/12h, metformina850/12h,atorvastatina20/24h, paracetamol 1gr/8h Rodilla izquierda: hueco poplíteo con úlcera indurada, no dolorosa a la palpación, ROT y pulsos conservados, no limita movilidad y fuerza. Resto de exploración física sin hallazgos de interés. Se decide tratamiento antibiótico, se solicita radiografía de rodilla y analítica. La paciente tiene una mala evolución, la lesión ha aumentado de tamaño se abscesifica, desarrolla linfadenitis regional, radiografía sin lesión ósea, analítica con signos de infección y serología negativa. Se deriva a traumatología Traumatología: ingreso y desbridamiento de la herida, microcultivo negativo. Tras tratamiento antibiótico y curas locales no se consigue cierre por segunda intención, su médico completa estudio para descartar otras enfermedades ulceroglandulares como tularemia, fiebre por arañazo de gato, esporotricosis que resultó negativo, decide derivar a dermatología para despistaje de tumor maligno. Dermatólogo: biopsia con hallazgos de granulomas, se sospecha de tuberculosis cutánea, tras pruebas complementarias la paciente fue diagnosticada de TBC cutánea primaria no bacilífera. Actualmente continúa con tratamiento antituberculoso y buena evolución clínica.
Conclusiones
La tuberculosis cutánea es infrecuente pero su presencia está íntimamente ligada al aumento de tuberculosis sistémica y por ello no debemos olvidarla en los diagnósticos diferenciales ya que por suerte es una enfermedad hoy día tratable y con buen pronóstico. Nuestra paciente tuvo una inoculación directa en la piel de la micobacteria ya que se descartó otra primoinfección, se formó una pápula infiltrada que evolucionó a úlcera indolora, indurada. Luego por diseminación de la infección, aparece una linfadenitis regional constituyendo el denominado complejo primario de Ghon. En ocasiones este tipo de lesiones tienden a disminuir de tamaño y calcificarse pero a veces por compromiso del sistema inmune forman abscesos e incluso puede diseminar por vía hematógena.
Palabras Clave
Tuberculosis cutanea. Primoinfección cutanea.

Autores de la comunicación


Médico Residente de 2º año de Medicina Familiar y Comunitaria. Centro de Salud Plaza de Toros. Almería


Médico Residente de 2º año de Medicina Familiar y Comunitaria.Centro Periférico de Especialidades La Bola Azul. Almería


Médico de Familia y Adjunto del Servicio de Urgencias. Hospital Torrecardenas. Almería

Póster