Fitofotodermatitis: cuando sol y plantas se confabulan.

Ámbito del caso:
Presentamos un caso de un paciente con placas eritemato-descamativas y pruriginosas en ambas piernas por fitofotodermatitis.
Motivos de consulta:
Varón de 25 años que acude a la consulta de Atención Primaria por máculas eritematosas que han aparecido en la parte posterior de ambas piernas, que le producen intenso prurito y que tienen 2 días de evolución. Comenta que hace unos años sufrió un cuadro parecido de unos 10 días de duración y que mejoró notablemente con una crema y unas pastillas que no recuerda.
Historia clínica:
EXPLORACIÓN FÍSICA: Buen estado general. Normocoloreado. Bien hidratado y perfundido. Estable hemodinámicamente. Posee extensas placas eritemato-descamativas bilaterales y simétricas, con bordes inflamatorios y bien delimitados, y superficie liquenificada, en la parte posterior de miembros inferiores. Resto normal. Reinterrogando al paciente, nos refiere que unos días antes había estado en el campo, en pantalón corto, recolectando algunos productos de su huerta, caminando entre higueras. Después se quedó dormido, boca abajo, bajo la sombra escasa de un ciprés. Éste no cubría sus piernas de la exposición solar. Algo parecido le había ocurrido 2 años antes. Evolución: Se inició tratamiento con antihistamínicos y corticoides, concretamente, Dexclorfeniramina 2 mg (miligramos), 1 comprimido cada 8 horas y Metilprednisolona emulsión cutánea, 1 aplicación cada 12 horas, durante 5 a 7 días. Además, damos recomendaciones de autocuidado, como lavar la zona con jabones de pH neutro, aplicar compresas frías locales para aliviar el prurito, y el uso de protector solar en la zona afectada. A la semana, el paciente vuelve a consulta para revisión de las lesiones, habiendo éstas desaparecido por completo. Diagnóstico diferencial: Psoriasis en placas o dermatitis irritativa de contacto. Diagnóstico: Placas de fitofotodermatitis en parte posterior de ambos miembros inferiores.
Conclusiones:
La fitofotodermatitis, es una inflamación de la piel provocada por el contacto de determinadas plantas, siendo necesaria la exposición al sol para activar el proceso. La respuesta inflamatoria que se observa es una reacción fototóxica a compuestos químicos fotosensibilizantes (psoralenos) de diversas familias de plantas, provocando una reacción no inmunológica. No es una alergia, y por tanto no precisa de sensibilización previa. El grado de reacción cutánea depende del tipo y de la cantidad de sustancia fototóxica que penetra en la piel, así como de la dosis de irradiación lumínica. Las principales plantas productoras de fitofotodermatitis son, en nuestro medio: - Rutáceas: cítricos (lima, naranja, limón). - Apiáceas: zanahorias, eneldo, hinjo, perejil, apio. - Fabáceas: leguminosas. - Moráceas: higueras (sólo hoja y tallo). - Hipericáceas: Hierba de San Juan. En la fase aguda, las manifestaciones cutáneas son variables, desde prurito sin lesiones, a grados variables de eritema, edema, vesículas y ampollas. Es muy característica la distribución (en zonas fotoexpuestas) y la presencia de lesiones lineales o figuradas. Una vez solucionado el cuadro, puede persistir una hiperpigmentación postinflamatoria. Este proceso es frecuente en nuestro medio, sobre todo, en ciertas profesiones como jardineros o agricultores.
Tres palabras claves extraídas del Medical Subject Headings (Mesh)
Placa eritemato- descamativa, Higueras, Luz solar.

Autores de la comunicación

Jéssica González García
Médico Residente de Familia de 2º año. Centro de Salud de Bormujos. Bormujos. Sevilla.

José María Páez Pinto
Médico Adjunto de Familia. Centro de Salud Bormujos. Sevilla.